Se quejan algunos, probablemente con razón, de la excesiva presencia mediática –en medios y en redes– generada por la instalación de la gastroneta de Daviz Muñoz en las puertas de un conocido centro comercial del centro de Zaragoza, como se escribía antaño y aun hoy; o sea, El Corte Inglés.

GoXo, que así se llama la máquina, traída –¡oh paradoja!– sobre un remolque, fue creada por el cocinero durante la pandemia como servicio de cocina a domicilio y ya el año pasado se convirtió en restaurante móvil, siempre vinculado al mentado centro comercial, ofertando «cocina original» sobre la ya conocida como callejera, según afirman. Probablemente este inusitado interés gastronómico responda ante el morbo de comer por ‘apenas’ 25-30 euros, las creaciones de un señor que ofrece habitualmente un menú de 365 euros en si casa madres, Diverxo.

Lo que no deja de ser algo provinciano. Vale que aquí no tenemos un ‘tres estrellas’ michelín, pero sí bastantes de una; y aunque no se vean gastronetas por el centro de la ciudad –¿por qué será, dilectos munícipes? ¿Para cuándo esa normativa?– haberlas, haylas. Se vieron, aragonesa y de forma solidaria, durante el confinamiento en Mercazaragoza para atender a los transportistas. Y ocasionalmente en el parque grande y determinados eventos.

También dispone Zaragoza de uno de los más masivos festivales de gastronetas, el Ebro Food Festival, también con amplia presencia aragonesa.

Quiérese decir que disponemos de oferta, por más que su emplazamiento en la calle sea complicado, salvo que se trate de un espacio privado, como el que ocupa GoXo. Pero al Ayuntamiento parece gustarle más la instalación de kioscos fijos, aunque sean redundantes con la oferta hostelera existente, que las móviles gastronetas, más ágiles para atender necesidades ocasionales.

Quizá los responsables del centro comercial, animados por el seguro éxito del madrileño, se animen a perseverar en esta oferta y nos sorprendan próximamente con una muestra de esa móvil gastronomía aragonesa en las puertas de su establecimiento. También funcionaría.