Si los jefes se lo han tomado con calma, este tapao no iba a ser menos. Mas volvemos, que con este intenso comienzo de temporada se pueden acumular los sucedidos y difuminar los recuerdos.

Al fin tenemos Gobierno, presidido como ya se sabía, por Jorge Azcón. Y, como es habitual, baile de nombres y competencias en los diez departamentos que configuran el mismo.

Ana cava alimentos nobles

Lo cierto es que, sin entrar en detalles, las nuevas denominaciones suenan bien. Por ejemplo, Medio Ambiente y Turismo, a cargo del turolense Manuel Blasco, donde podría entenderse que el turismo se va a entender desde el respeto al entorno.
El turolense se estrenó ante el sector en la presentación de Gastrotapas, donde prometió que la gastronomía sería el eje principal de la presencia aragonesa en FITUR el próximo enero. Y que no podía firmar la ampliación del espacio, porque los contratos son para cuatro años, dando a entender la escasa audacia del equipo anterior. Audacia que no le faltó al consejero, en el mismo acto, que trabajaría para que el turismo suponga el 15% del PIB de Aragón cuando termine la legislatura.
Tal fue el impacto de la noticia que a los camareros de El Molino de san Lázaro –interesante mezcla de eficaz veterania y desenfadad juventud– se les caían las copas de las bandejas con una frecuencia inusual. Tendrán que renovar vajilla…
Menos mal que Carmen Urbano ya no acude a estos actos. Le hubiera dado un infarto. Pues aunque el menú introducía numerosos productos aragoneses –salvo el bonito y el salmón–, eso sí elaborados de forma global tataki, blinis, pan bao, kebab, arepa–, el cava no era aragonés. El, por otra parte magnífico, Anna de Codorniu, catalán para más señas. Del que hubo escasez, por más que a algunos privilegiados se lo sirvieron hasta el final; ventajas de peinar canas será.
Por cierto, el nuevo director general, que lo es de Turismo y Hostelería –interesante novedad, nunca la Hostelería había figurado así en un organigrama de la DGA– es del gremio, pues Jorge Moncada, hasta la fecha era presidente de la Asociación de Agencias de Viaje de Aragón, lo que supone que conoce bien el sector.

Tampoco suena mal Agricultura, Ganadería y Alimentación, que pierde Medio Ambiente, pero recupera la Alimentación en su enunciado. Al frente no está un militante de Vox, sino un conocido del sector y también profundo conocedor del mismo, Ángel Samper, dirigente del sindicato agrario Asaja.
Expectación también ante su primera comparecencia ante sus administrados. Fue en el  XIV Congreso de la Asociación Española de Economía Agroalimentaria, que ha pasado con sigilo por los medios aragoneses, quizá por sus carencias en comunicación.
Allí,  en el CIHEAM Zaragoza, en el Campus de Aula Dei, el nuevo consejero ofreció un discurso sencillo, en el que habló de economía social, de valorar a los productores agroalimentarios, de que la alimentación entre en la escuela, de defender a los pequeños agricultores y ganaderos… agradeciendo a Vox que le permita desarrollar su propia visión del sector. Un futuro excargo, vinculado a Podemos no se lo creía. Sorprendió, ciertamente. Veremos que pasa en un próximo futuro, cuando las palabras den paso a los hechos.
De momento el director de Caza y pesca, José María Valero, valedor de Millán Astray como legionario que fue, sigue en su cargo. Igual que la directora general de Justicia, de cuyo nombre no quiero acordarme.

Todavía hay carencias que afectan al organigrama del sector, con cargos aún vacíos. ¿Pasará Sarga ya de forma oficial a Medio Ambiente y Turismo? ¿Se nombrará en breve director/a del CITA? Pues la anterior, Lucía Soriano, fue cesada fulminantemente y de inmediato, por órdenes de arriba, según le han contado a este tapao. Debía ser demasiado podemita…

No es política, pero lo parece. Las elecciones para designar los miembros de la nueva Junta directiva del Comité Aragonés de Agricultura Ecológica, de la que saldrá el presidente, se auguran reñidas. Tras una junta de consenso hace cuatro años, que saltó por los aires hace ya tiempo, se prevén dos candidaturas, una auspiciada por la mayoría de organizaciones agragrias, Asaja, Upa, AragaFACA, es decir las cooperativas, y otra por el resto, oséae Uaga y el actual presidente, Antonio Artal.
Mientras tanto, los importantes empresarios del sector ecológico, que los hay, esperar a ver qué pasa.
La solución, a principios de octubre.

 

Tras diferentes etapas, abierto y cerrado, Casa Hermógenes, en el Tubo zaragozano, cierra con esta denominación para convertirse  en trattoria, aunque siempre de la mano de Hermógenes. La Tarantella es su nombre y promete, además de pasta y pizza, pescado, carnes y una gran bodega de vinos italianos.

 

Borsao Joven Selección 2021 aparece el primero en la lista de Los mejores vinos españoles calidad-precio, que ha publicado en Expansión Federico Oldenburg, con veinte referencias nacionales. Enmarcado en la DOP Campo de Borja, por 5,20 euros, el autor destaca que con un precio tan asequible que Wine Advocate, la publicación del gurú vinícola estadounidense Robert Parker, lo señalara como «posiblemente el vino con mejor relación calidad-precio del mundo». No es el único aragonés en la lista, donde en el puesto tres aparece Honoro Vera Garnacha 2021, de Bodegas Ateca, en la DOP Calatayud, con un precio de 6,40 euros.

 

Juan Ramón Sau, del Grupo La Bastilla, fue finalista en el Concurso Nacional de Cocina Ajo Morado Las Pedroñeras, por su plato Royal de ajo morado de Las Pedroñeras, bacalao escarchado con jugo de ajo y pimientos al fuego.

 

 

¿Habrá dos listas, o tres?