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Coinciden en el tiempo dos iniciativas que sí ponen en valor la gastronomía zaragozana y aragonesa. Una a título particular, Viñarroz, donde Bodega San Valero promociona su gama de vinos Particular, a la vez que el arroz aragonés, sin ningún tipo de apoyo institucional.

Y el Mes del Ternasco Asado, en su tercera edición, con el decidido apoyo del Gobierno de Aragón ‒el consejero de Agricultura, Ángel Samper, así lo manifestó en la presentación‒ que pretende extender la oferta de ternasco asado ‒tradicional e innovador‒ en nuestros restaurantes.

Nada que objetar a las iniciativas privadas que promocionan o hacen concursar a diferentes platos y productos, sin especial carácter diferenciador, como puedan ser las hamburguesas o las croquetas. Cada cual es soberano para proponer actividades y, si cuentan con el favor del público ‒como así parece‒, todos contentos.

Mas para conseguir que la gastronomía aragonesa sea de verdad un elemento atractor de visitantes, que vengan aquí a comer, hay que diferenciarse del resto de la península. Algo que se puede conseguir a través del ternasco, muy poco conocido más allá de nuestras fronteras, o del arroz, del que apenas se sabe que Aragón es un gran productor, aunque las cosechas se vayan reduciendo año tras año. O como también está logrando la ruta Descubre la trufa, que debería ampliar sus propuestas a todo el territorio.

Por supuesto que otras convocatorias, como el Certamen de restaurantes o los diferentes concursos de tapas contribuyen a consolidar nuestra presencia mediática, especialmente en casa, pero están aún lejos de ser capaces de atraer a visitantes que se desplacen por las ofertas gastronómicas. Tiempo hay para profundizar en ello.

Se trata, como se ha escrito aquí en numerosas ocasiones, de generar una oferta concreta y específica, mejor si está vinculada al calendario y el patrimonio cultural, capaz de colocarnos en el mapa. Lo que hoy no sucede, más allá de singulares excepciones, generalmente de carácter personal.

Y aquí sí resulta imprescindible el respaldo e impulso institucional de forma coordinada con el sector. Seguimos a la espera.