Justicia Alimentaria ha organizado una jornada en el centro gastronómico oscense que ha reunido a una veintena de profesionales del sector
El objetivo es promover comedores escolares más sostenibles y crear una red que facilite la transición alimentaria a nivel autonómico
Se han reunido una veintena de cocineros y cocineras de comedores públicos de Aragón. Foto: CIGA.
Una veintena de cocineros y cocineras de comedores públicos de Aragón se han dado cita en el Centro de Innovación Gastronómica de Aragón de WALQA para reflexionar sobre cómo poner en marcha comedores más sostenibles que prioricen productos locales y de temporada. El objetivo es crear una red de colaboración entre los profesionales que facilite la transición alimentaria en los comedores públicos de la comunidad.
La jornada, titulada Intercambio de experiencias del personal laboral de comedores escolares de Aragón ha sido promovida por Justicia Alimentaria, una organización que trabaja para garantizar el acceso a una alimentación justa, sostenible y saludable.
El evento ha contado con la participación de tres voluntarios de la organización: el cocinero José Luis Cabrero del CEIP Asunción Pañart de Aínsa y las cocineras Aurora López del CEIP San Juan de la Peña de Jaca y Carmen Martínez, anterior cocinera del CEIP El Espartidero de Zaragoza. Los tres son profesionales con una amplia experiencia en prácticas sostenibles en comedores e impulsores de menús saludables en sus centros de trabajo. En sus intervenciones han explicado cómo pusieron en marcha la transición alimentaria en sus cocinas así como características de las elaboraciones que ofrecen al alumnado e ideas de ruedas de menú que prioricen alimentos de origen local y de temporada.
Los asistentes han podido reflexionar de forma colectiva sobre la realidad de los comedores escolares y han compartido ideas sobre cómo implementar un menú saludable y de cercanía en sus centros teniendo en cuenta a toda la comunidad educativa: familias, monitores de comedor, profesorado y equipo directivo.
La jornada ha culminado con la degustación de segundos platos a base de proteína vegetal: hamburguesas de garbanzos, acompañadas de crema de calabacín y lasaña de lentejas, dos de los platos estrella de estos comedores aragoneses.
José Luis Cabrero ha declarado que desde Justicia Alimentaria están “muy contentos con la respuesta y gran aceptación que ha tenido la jornada”. “Ha venido mucha gente profesional con ganas de cambiar métodos y procesos hacia una alimentación más sostenible”, apunta. Sin embargo, el cocinero de Aínsa considera que, para avanzar, sigue haciendo falta cualificación e infraestructura. “En Aragón tenemos gente que quiere dar el paso, ahora es la administración la que tiene que implicarse para que podamos conseguirlo”, concluye Cabrero.
Por su parte, Ismael Ferrer, director gastronómico del CIGA ha calificado la jornada como “de total pedagogía”. “Hay que formar a los cocineros y apostar por la alimentación de cercanía y nuestro patrimonio alimentario. No nos podemos permitir que haya centros donde todavía se siga ofreciendo comida envasada de mala calidad que viene de cientos de kilómetros”, concluye.
