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Con motivo del lanzamiento de su IPA, Ambar grabó un vídeo en el que se reunieron cinco maestros cerveceros aragoneses para conversar acerca de este estilo. Foto: Gabi Orte Chilindrón.

 

Si hay algo de lo que se viene hablando desde hace tiempo en el mundo cervecero, es de las IPAs. Tanto es así, que incluso los productores más conocidos y poderosos, actualmente ofertan una elaboración de este estilo en su catálogo.

Decía Coco Chanel en una de sus frases más célebres: «La moda pasa, el estilo permanece»; si adaptamos la frase al tema de la cerveza llegaremos a la conclusión de que la IPA permanecerá como estilo cervecero.
Apuntamos aquí que la primera evidencia de pale ales elaboradas con este nombre data de 1705, pero el hecho de que se haya puesto de moda y la idea que circula, en algunos ambientes, de que es la única que merece la pena beber, «desaparecerá como lágrimas en la lluvia», como sostiene el replicante Roy Batty en su monólogo final en Blade Runner.

Empezaremos por el principio, valga la perogrullada. IPA son las iniciales de India Pale Ale, y la denominación proviene de las cervezas que en la época victoriana se enviaban desde Inglaterra a lo que denominaban el Imperio, especialmente a la India.

Añadiremos, como dato histórico, que la primera mención publicada de esta denominación aparece en el Liverpool Mercury un 30 de enero de 1835.

CER IPAS lote

Ambar comercializó hace un tiempo un lote de cervezas IPA aragonesas, la suya y cuatro artesanas. Foto: Cortesía Ambar.

Las colonias

Pensar en ciudadanos británicos añorando su hogar y sus ales, tenía todas las trazas de no ser un escenario idílico, por lo que había que solucionar alguna de las dos cuestiones y se empezó por la cerveza. El colonialismo, ya para más tarde.

La cerveza que salía de la metrópoli con destino a las colonias y hacia la joya del Imperio, la India, tenía por delante un largo viaje. Es sabido que desde la segunda mitad del siglo XVIII, se tiene constancia de que se aconsejaba a los cerveceros que era «absolutamente necesario» añadir una carga de lúpulo más alta a la cerveza, en caso de enviarla a lugares con climas cálidos.

De aquí que resultara una cerveza con un nivel de alcohol inusual para la época y altamente lupulada. Nos encontraríamos con una ale clara, con cabeza de espuma blanca y persistente y cuerpo medio-bajo. Presencia moderada y de soporte de las maltas, con balance claramente favorable a los lúpulos tanto en aroma como en sabor y un final seco con amargor extendido y persistente.

CER IPA soldados

CER anuncio IPA

La Indian Pale Ale nació para surtir de cerveza a las colonia británicas, incluidas sus tropas.

Se supone que la primera impresión al probar la cerveza de los desplazados a las colonias, sería de sorpresa y puede que de desagrado. No les recordaba a las pale ale’s de su añorada isla, pero «What the fuck, we’re british», y como buenos británicos, sin otra alternativa, dieron buena cuenta de todo lo que llegaba y de más que hubiera llegado. A gusto de los cocineros, comen los frailes.

Y hete aquí que una circunstancia no prevista, preservar la conservación de la cerveza, origina un estilo de cerveza que ahora mismo alguien está disfrutando en el código postal N17 de Londres o en las más de 150 cerveceras de San Diego en California.

Distintos avatares rodean a este estilo y su popularidad declina con el tiempo y prácticamente desaparece en la segunda mitad del siglo XX, y son los cerveceros artesanales los que la redescubren en los años ochenta de dicho siglo, e inspirándose en el estilo de las viejas IPAs las dirigen por nuevos caminos y directrices que, sin duda, trataremos en próximas entregas.

Permítanme, para acabar, una opinión personal. He comenzado este artículo hablando de moda, cosa que me resulta inquietante porque siempre he pensado en lo que conlleva. Creo que lo que se pone de moda quema las etapas de una forma excesivamente rápida, no tiene una buena digestión.
Espero y deseo que esto no ocurra con las IPAs, con la garnacha y con otras cosas, a su elección, que no se lo merecen. ¡Ah!, y recuerden que las hombreras también fueron moda.