Viñas del Vero Gewürztraminer presenta un brazalete realizado con “capimdourado”, una planta de color oro natural que nace en Brasil.

 

Este año, Viñas del Vero Gewürztraminer presenta el regalo más original para el Día de la Madre. Se trata de un brazalete elaborado a partir de “capimdourado”, una planta de color oro natural que nace en Brasil y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad. Esta pieza de biojoyería refleja el compromiso con la sostenibilidad de la bodega Viñas del Vero.

El diseño muestra finas hilaturas doradas entrelazadas entre sí, que representan la alegoría de los lazos maternofiliales y reflejan el amor maternal que,a pesar de las muchas vueltas que davida y las barreras que surjan, siempre se mantendrá por encima de todo.La belleza de su color, unida a la habilidad manual de los artesanos, hacen que sea una pieza de joyería única y exclusiva, bañada en oro e hipoalergénica.

Este singular regalo acompañará el brindis con este vino blanco de la D.O. Somontano. Sus aromas particularmente intensos a pétalos de flores y fruta exótica, así como su expresividad y untuosidad en boca, provocan que cuente con innumerables amantes de su delicadeza.Es perfecto para acompañar ensaladas, pastas, pescados, mariscos o platos exóticos.

El brazalete se une a las innovadoras propuestas que Viñas del Vero Gewürztraminer ha realizado en los últimos años, como “Alfaya”, la joya que se inspiró inspirada en este vino, y la el “Perfume de Gewürztraminer”, la primera fragancia femenina del mundo vino basada en los inconfundibles aromas de esta variedad de uva.

Sobre el “capimdourado”
El “capimdourado” es una fibra textil de oro vegetal cuya característica principal es el color brillante y dorado. De ahí que su nombre en portugués sea “capimdourado”, cuyo significado es “hierba dorada”. Cultivado en el “Cerrado” brasileño, su utilización para ornamentación es ancestral y se debe a los nativos de la etnia Xerente.

Inicialmente, su uso era cotidiano y, poco a poco, con la llegada del ecoturismo y la divulgación de estas piezas de delicada artesanía, se fue empleando en biojoyería. Actualmente, la continuidad de esta preciada planta está garantizada por la sostenibilidad de su cultivo. La recolección requiere cuidados especiales para que la especie pueda seguir existiendo y ser usada en las siguientes generaciones.