Estamos en el Gran Hotel Ritz, durante la ocupación nazi de París. Allí se alojan ocasionalmente jerarcas nazis como Göring y Goebbels cuando visitan la capital francesa y su bar es frecuentado por los mandos de la Gestapo, las SS y la Wehrmacht, colaboracionistas franceses, hombres de negocios, aduladores, artistas, espías, incluso miembros de la Resistencia. Allí oficia Frank Meier, el barman del Ritz, que ya había servido sus afamados cócteles a Ernest Hemingway, Scott Fitzgerald, Coco Chanel, Mistinguett, Sacha Guitry, Jean Cocteau o Arletty.
Aparentemente imperturbable, el barman del Ritz guarda varios secretos, como que es judío.
A partir de archivos y relatos orales –entre ellos, del propio sucesor del barman, Collin Fueld–, el historiador Philippe Collin recrea el ambiente del bar del hotel, en contraste con la asfixiante del resto de la ciudad sumida en la miseria.
Con fragmentos del diario de Meier como recurso, la novela retrata personajes históricos, desde los nazis que acaban oponiéndose a Hitler, como Carl-Heinrinch von Stülpnagel o Hans Speidel, hasta colaboracionistas como Sacha Guitry o Coco Chanel. La certera mirada del siempre discreto coctelero retrata un universo que solo es posible en circunstancias excepcionales.
Como describe la esposa del cesado director del Ritz, Blance Auzello –de la que el coctelero está enamorado–, «su bar es como el vientre de una madre, aquí nos sentimos protegidos de los ataques de la vida exterior. Sus cócteles son como un hechizo. Nos quitan las penas. Son los únicos que tienen ese poder».
Bebidas, intrigas políticas, represión, falsificación de documentos, espías, militares, hosteleros, todo se mezcla en un relato que apenas se extiende de 1940 al 1944, pero que explica la primera mitad del siglo XX de forma apasionante.
Para leer –y beber: hay muchas y sugerentes propuestas– de un tirón al calor del verano. Fue así como podía haber pasado.
El barman del Ritz
Philippe Collin. Traducción de Adolfo García Ortega. Galaxia Gutenberg.
Barcelona, 2025. 392 páginas. 21 euros.